28/1/16

La pirámide: algo más que una figura de acrosport (26/01/2016)

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En la primera sesión, para calentar motores, comenzamos con una actividad llamada pirámide. Veamos un poco sus características.


Objetivo: llegar a consensos de forma progresiva

Desarrollo: se forman grupos pequeños, que tienen que llegar a un consenso. Una vez lo alcancen, deberán juntarse con otros grupos para hacer lo mismo. 

Resultado: los alumnos tienen la oportunidad de expresarse.

¿Cómo lo hicimos nosotros?

  1. En grupos de 3, tuvimos que decidir cuál era el punto más importante de los contenidos que vamos a tratar en esta materia. Es decir, debíamos ponernos de acuerdo en uno de los 14 temas. A los grupos de 3 que llegamos a un acuerdo antes que los demás, tuvimos que discutir cuál es el tema menos importante. 
  2. Una vez terminaron todos los grupos, nos juntamos de 2 en 2, para ponernos de acuerdo entre 6 personas.
  3. Una vez el grupo de 6 llegó a un consenso, nos juntamos con otro grupo de 6. 
  4. Así quedamos dos grandes grupos que defendimos nuestras opiniones.
  5. Por último, todos llegamos a un consenso. Aunque tras escuchar las opiniones de los dos grandes grupos, ya estábamos todos de acuerdo.
En nuestro caso, ambos grupos llegamos a la misma conclusión. Todos los grupos consensuamos que el tema más importante era el de planificar y programar. 

¿Por qué utilizar esta actividad?

En nuestro caso, no tuvimos mucha discrepancia, pues rápidamente nos pusimos todos de acuerdo en cuál era el tema más importante para la docencia de lenguas. Sin embargo, en una clase de lenguas extranjeras, esto puede dar mucho juego, por varias razones:

  • Los alumnos se ven obligados a hablar. En grupos pequeños sienten más confianza para hacer sus aportaciones, por lo que es más probable que participen.
  • El profesor tiene la oportunidad de pasar por los distintos grupos e ir escuchándolos para corregir posibles fallos que escuche. Así, puede atender a todos los alumnos. 
  • En caso de que algún grupo sea más rápido que los demás, el profesor puede plantearles otra pregunta. En nuestro caso, nos planteó lo contrario, es decir, cuál es el tema menos importante. De esta forma, ningún grupo está sin hacer nada. 
  • La lengua se utiliza como instrumento para defender una opinión o argumento. En otras palabras, se usa en contexto, de manera más real que en ejercicios tradicionales.


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